Eres mi mejor destino

Era un día cualquiera y sin planearlo de repente estaban ellos dos allí, delante de ellos, se me puso un nudo en el estómago quedándome sin respiración por un momento y se me secó la garganta. Estaba a punto de conocer a las dos personas más importantes en la vida de mi pareja, después de mucho tiempo esperando a que llegase este momento, no sabía con seguridad si estaba preparada, ya que los nervios invadieron mi cuerpo. Entonces aparecieron, y no hicieron falta ningún tipo de presentaciones, ya que todos sabíamos quién era cada uno; aunque comenzamos a hablar aunque más conmigo era como si me conociesen de toda la vida.
No sabría cómo contaros cómo me sentí estando a su lado, ellos eran diferentes no sólo físicamente sino también interiormente, pues se notaba que eran completamente opuestos, se notaba que pese a los años aún seguía habiendo un brillo en sus ojos del amor que sienten, con sus piques y su forma tan peculiar de demostrarse cuánto se aman; sin duda no contaba con que sucediera de esa forma sino que fue mucho mejor pese a que no era cómo me imaginé aún sin ser capaz de controlar la arritmia con mis nervios.
 Sin duda estaba para nosotros sin ser para nada lo habitual en situaciones tan repetitivas, como si nada, ellos eran ése tipo de personas que atraviesan en tu vida cómo si desde siempre hubiera estado eso para ti cuando sucede por casualidad y es que gracias a ellos, soy afortunada de tener a mi mejor destino conmigo.

Las corazas son tus peores enemigos

¿ Con cuántas personas que conoces no viven encerrados en sus corazas ? Pensarás erróneamente que son una minoría que pasa inadvertida aunque en realidad hay muchísima gente que vive completamente enjaulada. Las corazas son unas barreras que sirven para protegernos del exterior dado que hay situaciones, personas o circunstancias que nos ocasionan heridas, por cicatrices incluso por nuestras expectativas sobre los demás, por norma general eso de normalizar tu coraza para justificar ciertos comportamientos hacia otras personas ya que exigir que sean ellos en vez de nosotros mismos los que destruyamos es algo...como decirlo, ¡ ah sí ¡ Un sinsentido puesto que deberían teniendo en cuenta que es su responsabilidad el derrumbar o resquebrajar aquello que tanto se afanaron en construir sin tener que depender exclusivamente de otros, sé que en algún momento dado una mano amiga viene bien aunque no tiene que ser un hábito, obligación el usarles para terminar por beneficiarse uno; posiblemente sólo demuestre que hay gente que tiene demasiadas inseguridades, miedo y temores sumado a que se ve incapaz de hacerlo por sí mismo lo que muestra que no son tan fuertes como se creen, sumado a la facilidad para tergiversar para salir ganando; que sus miedos son sólo suyos como con todo aquello que tienen que lidiar con ello para aprender sobre ellos ya que nadie podrá hacer el trabajo por ellos.

De nada sirve ponerse corazas si te falta la valentía y el coraje necesarios para derribarlas, fingir que alguien se conoce es lo habitual hoy día aunque no hay muchos valientes que son capaces de hacer frente a sus pesadillas, miedos y temores para salir reforzado de ésa particular batalla contra ellos mismos, de tanto huir tan sólo se engrilletarán por lo que les costará más ver la vida con otro tipo de perspectivas. No, no es para nada sencillo y fácil destruir tus propias limitaciones pero si no te esperas en hacerlo tú, deberías de dar por sentado que otros lo harán por ti librándose de esa carga que para algunos es demasiado trabajo, debe ser que hay una falta de responsabilidad y compromiso consigo mismos para tener mucha cara para "obligar" a hacerlo a los demás. Si quieres rodearte de corazas porque la incertidumbre, los miedos o eres incapaz de lidiar con tus demonios hazlo teniendo claro que nadie más que uno es quien tiene la obligación moral de romperlas, me temo que el el viaje de conocerse a uno mismo no es tan sencillo como se piensa mucha gente pues se ahonda en profundidades que a veces se niegan o rechazan aún sabiendo que romper aquello que te limita, que tan sólo son un peso pesado que nos impide crecer en más de un aspecto de nuestra vida.